La primera parte del recorrido la hicimos muy cercanos al mar y fue muy bonito, con muchas palmeras y canales. Los kilómetros iban pasando rápido. Luego la carretera nos llevó más hacia el interior con lo que panorama cambió: mucha
más circulación, íbamos bastante más lentos, cortes de tráfico por obras y por desgracia un accidente. La gente aquí no acostumbra a llevar casco con la moto y es imprescindible, especialmente en este país.
más circulación, íbamos bastante más lentos, cortes de tráfico por obras y por desgracia un accidente. La gente aquí no acostumbra a llevar casco con la moto y es imprescindible, especialmente en este país.
Paramos a comer en un bar de carretera de los de aquí nuestro menú especial de travesía, o sea, samosas, pakhodas y agua y algo de fruta y luego todo cambió: la carretera que iba a nuestro destino final se acercaba de nuevo a la costa y el paisaje se volvía a hacer muy agradable. Sobre las 4 de la tarde llegamos a Varkala. Como estábamos cansados y no nos apetecía tiramos de Lonely. El primero, lleno, pues era muy barato. Menos mal por otro lado, pues estaba lejos de la playa. El segundo recomendado por mochileandoporelmundo, cerrado por reformas. A la tercera fue la vencida: nos alojamos en el Jicky’s. Bueno (a 2 minutos de la playa), bonito y barato (6,24€ la noche). Genial. Dejamos mochilas y a conocer el lugar.
Varkala tiene la parte propiamente de pueblo que ni la conocimos. Y su parte de playa, de la que no nos movimos en 3 días. Sobre la playa existe un acantilado con un precioso paseo que es donde se encuentran todos los hoteles y resorts y bares pero de una manera muy integrada con el entorno. Es simplemente precioso, un lugar ideal para relajarte sin más preocupaciones que pasear o no, tumbarte en la arena o no y comer. Nosotros esa tarde recorrimos algo del paseo y bajamos un rato a la playa al atardecer que es cuando se llena de la gente local. Es increíble ver el ambiente que hay y como la disfrutan desde los mayores como los pequeños. Con la noche, nos retiramos a nuestros aposentos. Decidimos quedarnos aquí otros 2 días, el máximo que podíamos…
El viernes lo pasamos igual, es decir, levantándonos tarde, desayunando con calma, yendo un rato a la playa (ojo, el sol aprieta mucho), y observando y participando de la vida local. Este día fuimos bien preparados al atardecer a la playa para tomar fotos.
El sábado seguimos la misma rutina sólo rota por la mañana cuando vimos que volvíamos a tener la rueda pinchada. Nada, preguntamos a la gente local y nos dijeron que había un taller Mahindra a 10 minutos andando del hostel. Así que nos acercamos al taller y el mecánico al ver la cubierta nos dijo que había que cambiarla. Realmente estaba bastante hecha polvo. Aprovechamos y nos ajustó frenos y nos cambió el aceite del motor que salió negro y encima casi no quedaba. Menos mal, no hubiéramos andado más de 2 etapas. Lo detentó al oír la moto. Un profesional. Y nos cobró por todo unos 24€. Bien pagados. Y para curarnos de tanto «estrés», nos fuimos un rato a la playa. Además esa noche el Barça y el Atleti se jugaban la liga y había que estar relajados ;-). Al final, a pesar de las promesas del bar donde solíamos ir, no pudimos verlo, sólo oír lo 🙁
Finalmente el domingo nos íbamos de Varkala. Un lugar para volver
Total gasto para 2 personas, 3 días: 74,91€
– Alquiler moto: 9,4€
– Gasolina: 6,77€
– Hostel: 18,8€
– Comida: 28,62€
– Reparaciones moto: 12,5€
Total gasto por persona, 3 días: 12,48€/persona/día