Viajar a Senegal

Resumen
Viajar a Senegal resulta una experiencia única, no tanto por su naturaleza que también ofrece rincones bonitos, sino por su gente. Se trata de personas amables, dispuestas a ayudarte y cordiales. Son gente con rostros muy expresivos y extremadamente fotogénicos, especialmente los niños. En cuanto a las mujeres, siempre van ataviadas con unos vestidos muy coloristas que contrastan mucho con su piel tan oscura.
Más allá de Dakar, todavía mucha gente vive en poblados, sí, esos de casas de adobe y techos de paja, como en las películas y es posible disfrutar de costumbres ancestrales.
A nivel de naturaleza, el baobab, dota al paisaje de un sello inconfundible, al igual que sus atardeceres, con una luz de verdad, muy especial.
A nivel gastronómico la alimentación es muy básica: se alimentan de aquello que tienen al alcance, es decir, arroz con carne o arroz con pescado acompañado de salsa de cebolla o salsa de cacahuete.
De verdad, viajar a Senegal es una experiencia única y muy recomendable.
Lo que más nos gustó de viajar a Senegal 🙂
- La simpatía en general de la gente.
- Contemplar los atardeceres con esa luz tan especial.
- Toda la zona del País Bassari en torno a Dindefello: las cataratas y los pueblos de la parte alta.
- Pasear por las playas de Dakar.
- Vivir el ajetreo del mercado de pescado de Mbour cuando llegan las piraguas.
- La forma tan colorista con la que visten las mujeres.
- Los baobabs, el árbol más representativo de Senegal.
- Pasear en piragua por los manglares de Casamance y el delta del Saloum.
- Vivir en directo celebraciones de pueblos en mitad del bosque.
- Comer gambas por sorpresa en una aldea perdida en Casamance.
- Saborear el pescado tan bueno y fresco.
Lo que menos nos gustó 🙁
- La cantidad de basura que encuentras.
- Viajar en la última fila un “Sept-places”.
- La cantidad de mosquitos que hay en determinadas zonas.
- Un alojamiento precario y básico te puede costar en torno a 18-20 € la noche.
- La poca variedad en el menú.
Curiosidades
- El contraste que hay de vestimenta entre las mujeres, muy arregladas y coloristas y los hombres, más dejados
- Las lunas de prácticamente todos los coches y autobuses del país están rajadas
- La pasión con la que todos los jóvenes practican y viven el fútbol
- La cantidad y tamaño de los termiteros de los bosques
- El animismo y los fetiches
¿Cuanto nos gastamos en Senegal?
¿Qué visitar en Senegal?
Nuestra estancia fue de 17 días (del 8 al 24 de octubre de 2016) en los cuales visitamos la región de Casamance (guía), País Bassari (guía), Delta del Saloum, Mbour y Dakar.
Thionck Essyl (1 día)
Perfectamente accesible en transporte público y «sept-places». Se trata de una pequeña aldea animista en la región de Casamance, rodeada de bosques salvajes y al lado de los canales que vienen del río Casamance.
Niomoune (1 día)
Se accede a la misma con piragua. El entorno es muy bonito: baobabs y arrozales rodean la aldea. Son animistas, muy practicantes y extremadamente amables y sonrientes. Se pueden ver un montón de fetiches (objetos de conexión entre el hombre y las divinidades) en distintas casas.
Karabane (1 día)
Solo es posible acceder con piragua al tratarse de una isla. Es muy bonita y agradable
Visitas/actividades
- Playas
Se puede encontrar tranquilas playas de arena blanca donde sofocar el terrible calor con un plácido baño. Si se rasca un poco en el fondo del río se pueden sacar fácilmente almejas.
- Iglesia católica
En un estado deplorable pero interesante de ver
- Edificios coloniales
Servían para recaudar los impuestos en su época. Están en total ruina
- Cementerio colonial
Situado en medio de un bosque. Como curiosidad comentar que hay una tumba vertical que pertenece al capitán francés Prótet, quién pidió ser enterrado de pie para poder contemplar el río después de su muerte.
Elinkine
Aldea al lado del río de donde parten las piraguas a Karabane. Es un importante puerto pesquero en la zona. Por lo demás calles de arena, polvo y olor a pescado.
Boumhimbane
Interesante un paseo por esta aldea para ver como los niños practica la lucha (muy típica en este país) y contemplar uno de los fetiches más curiosos que se pueden ver: un ancla que nadie sabe como llegó allí y que se inclina a un lado u otro de la aldea cuando algún nacimiento, boda o funeral tiene lugar.
Oussouye (1 día)
Aldea importante en la zona, con mucha vegetación. Recomendamos realizar una excursión en bici (existen sitios de alquiler) por los hermosos bosques para visitar la zona. La gente vive como antaño, en casas de adobe con techos de paja. Son también animistas y se pueden ver un montón de fetiches.
NUESTRA EXPERIENCIA
Haz clic en el siguiente enlace para leer como fue nuestra experiencia viajando por Senegal.