
Tras unas cuantas horas, entrábamos en la estación de El Retiro de la ciudad de Buenos Aires sobre las 10:30 de la mañana. Allí nos esperaba mi tío Gerardo. Teníamos la suerte de quedarnos en su casa durante nuestro estancia en esta megaurbe. No llevó a su casa, en la avenida de la Plata, atravesando la famosa avenida 9 de Julio, la más ancha del mundo. Allí pudimos ver, aunque fuera de pasada el precioso Teatro Colón, el Obelisco, símbolo de esta ciudad y el ministerio de Salud y Desarrollo Social, con la imagen de Evita Perón en su fachada.
Al cabo de poco tiempo llegamos a la avenida de la Plata, donde tenía su casa. El barrio era bastante tranquilo y cercano al centro y varias de las zonas turísticas. Buenos Aires no atravesaba su mejor momento. La delinquencia estaba al orden del día y había que estar con los ojos bien abiertos. La mala situación económica contribuía a ello así como la corrupción reinante. El hecho de ir acompañados de mi familia, nos daba un grado más de tranquilidad.
Tras comer con mi tía y mi primo y buen rato intercambiando impresiones de nuestro viaje y de Buenos Aires, salimos, con mis tíos a dar una vuelta en coche. Sin llevar la cámara réflex, esa tarde visitamos la zona de El Caballito. Allí aparcamos para pasear un rato. Se trataba de un barrio con poder adquisitivo y mucha actividad comercial. Fuimos a conocer el mercado de El Progreso, donde era posible encontrar casi cualquier alimento y de gran calidad, eso si a precios correspondientes. Luego café y para casa.
Era el cumpleaños de mi tío y lo celebraban esa noche en casa, con un estupendo y típico asado argentino que iba a hacer mi primo Hector. Dedicaremos uno o varios posts al mismo pues merece la pena ;-). Disfrutamos de la cena como hacia mucho tiempo. ¡Que bueno! Wow. Después a dormir que llevábamos mucho tute.
El jueves nos despertamos muy tranquilamente. Sólo nos quedaban 2 días de viaje. Parecía mentira. Desayunamos y subimos con mis tíos en el coche a ver más de la ciudad, de nuevo sin la cámara réflex. Pasamos primero por el encantador y cultural barrio de San Telmo pero fuimos directos a la zona de la Costanera, al lado del mar. Estuvimos paseando un buen rato por la zona de Puerto Madero, muy verde y tranquila. Empezó a llover y dada la hora, decidimos ir a comer a la zona del barrio chino. De camino pudimos ver el moderno barrio financiero y la zona de Palermo. Tras aparcar llegamos algo mojados a un buffet libre chino, bastante bueno. Tras comer estuvimos paseando un rato pues ya había dejado de llover. Bien, sin ser apasionante.
Ya decidimos volver a casa pues volvía a llover. Con el coche de vuelta vimos los barrios de Lovida y Belgrano. Ya en casa, pudimos cenar unas estupendas pizzas caseras al horno cocinadas también por mi primo Hector ;-). Buen broche al intenso día.
El viernes era el día de vuelta per tratamos de aprovecharlo también al máximo. Primero fuimos de nuevo al barrio de San Telmo pero esta vez para pasear por sus callejones adoquinados y ver sus mercadillos de artesanías (el día anterior estaban cerrados). La verdad es que se podían encontrar mejores y más bonitas y artesanías que en Puerto Iguazu. Aprovechamos para comprar los ultimisimos regalos. De ahí fuimos a conocer el parque de Chacabuco, un oasis en mitad de la ciudad. Paseo y de vuelta a casa a comer. Este último día comímos unas deliciosas milanesas de res caseras. Buenísimas.
Por la tarde fuimos a ver la zona de Boca, incluido el estadio de fútbol. También tuvimos oportunidad de ver las famosas casas de colores y la bonita calle de El Caminito. Muy pintoresca.
De allí fuimos a casa a hacer por última vez nuestra mochila. Con mucha pena por cierto. Que tristeza nos invadía. Mis tíos muy amablemente nos llevaron al aeropuerto. Nos despedimos y allí nos quedamos esperando el que iba a ser nuestro último vuelo.
Salió puntual y tras unas 12 horas llega manos al aeropuerto de El Prat en Barcelona. Allí el cálido y sonoro de los nuestros y la alegría de verlos y poder disfrutar de ellos de nuevo,
mitigó al momento nuestra tristeza por terminar 11 meses de una experiencia maravillosa. La experiencia de nuestra vida. Alguna lágrima se derramó igual que a mi acabando este post…
Total gasto para 2 personas, 4 días: 224,47 €
– Autobús Puerto Iguazu-Buenos aires: 165,3 €
– Alojamiento: 0 €
– Comidas: 51,54 €
– Varios: 7,63 €
Total gasto por persona, 4 días: 28,05 €/persona/día